domingo, 21 de diciembre de 2008

de la necedad

 
Ayer desperté y me di cuenta que soy un necio.
No se cuando crucé la línea de ese magnifica parte previa que es la persistencia. Aquella que es admirable, virtud noble y grata de aquellos loables hombres que trabajan por conseguir sus sueños y objetivos a pesar de las adversidades.
 
No se cuando me convertí en necio, sólo se que ayer me di cuenta. Y es que la diferencia entre persistencia y necedad recae en el tiempo del logro de objetivos y de la misma nobleza del mismo, es decir, cuando el objetivo es alcanzable en un tiempo medianamente lógico es persistencia, pero cuando el objetivo ha tomado mas de la cuenta y además la meta se vuelve imposible de alcanzar es cuando uno se convierte en necio.
Como diría Silvio, será que la necedad parió conmigo, y tendré que llevar mi búsqueda hasta las últimas consecuencias, aun a pesar de que la deseada victoria sea tan amarga como la de Pirro, pero que le voy a ser, como ya dijimos soy necio, y mi obligación como necio es seguir en mi camino hasta las últimas consecuencias, muy a pesar de los golpes, los horrores y los olores (no viene al caso, pero rima).
Y es que la necedad, creo que mi necedad, es también un estilo de vida y no sólo la búsqueda de algo, se trata de ver la vida a mi manera, a través de mis ojos y solo de los mios y no de los demas... ver la vida y crear la vida en mis convicciones, en mis pensamientos, en mis gustos, en mis amores, en mi música y en mi intelecto.
 
El ser necio, terco, obstinado y porque no... imprudente, sin duda es una forma de vida poco deseada y mal vista, sin embargo si logramos nuestro precioso objetivo y vemos la luz como premio a nuestro duro esfuerzo y cerrazón entonces... ¡oh hermanos!, entonces la sociedad nos vuelve a premiar con el precioso y orgulloso adjetivo de persistente y nos convertimos en ejemplo de la sociedad y en inspiración para los niños.
Pero si no lo logramos.... triste melancolía... la necedad va creciendo, o mas bien, decayendo día a día.... la obstinación se va volviendo mayor, los objetivos se distorsionan, la realidad se vuelve confusa y entonces te conviertes en un acosador, un stalker!!
 
Espero quedarme en esta bendita necedad mía de ser necio, de como siempre luchar por lo que quiero sin conformarme con menos y menos con algo diferente, seguiré luchando por lo que quiero, defendiendo mis creencias y en busca de la verdad.
 
"Yo quiero seguir jugando a lo perdido,
yo quiero ser a la zurda más que diestro,...
 
Será que la necedad parió conmigo
la necedad de lo que hoy resulta necio
la necedad de asumir al enemigo
la necedad de vivir sin tener precio

Yo no sé lo que es el destino
caminando fui lo que fui
allá Dios que será divino
yo me muero como viví"
silvio rodriguez
 

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